Bill Gates, cofundador de Microsoft y uno de los filántropos más influyentes del mundo, ha anunciado que donará el 99% de su fortuna, estimada en aproximadamente 200.000 millones de dólares, a través de la Fundación Gates en los próximos 20 años. Este compromiso incluye el cierre definitivo de la fundación en 2045, marcando un hito en la historia de la filantropía moderna.
La Fundación Gates, establecida en el año 2000 junto a su entonces esposa Melinda French Gates, ha invertido más de 100.000 millones de dólares en iniciativas globales de salud, educación y desarrollo. Con este nuevo plan, Gates pretende duplicar esa cifra, destinando los fondos a combatir enfermedades como la polio y el VIH, reducir la mortalidad infantil y erradicar la pobreza extrema.
Gates expresó su deseo de no ser recordado como alguien que murió rico, inspirándose en las palabras del magnate Andrew Carnegie. Además, ha criticado los recortes en la ayuda exterior de Estados Unidos, señalando que afectan negativamente a programas vitales en países en desarrollo.
El plan también contempla un aumento progresivo del presupuesto anual de la fundación, que alcanzará los 10.000 millones de dólares después de 2026. A pesar de su generosidad, Gates sigue siendo una de las personas más ricas del mundo, con un patrimonio neto de 108.000 millones de dólares.
Con este ambicioso proyecto, Gates espera inspirar a otros multimillonarios a contribuir a un mundo más equitativo y sostenible, demostrando que la filantropía puede tener un impacto significativo cuando se aborda con compromiso y visión a largo plazo.
